El Parque de las Leyendas, el más importante zoológico y jardín botánico de nuestro país, no sólo ofrece recreación y diversión a sus más de 150 mil visitantes mensuales, sino también el conocimiento arqueológico a través de sus 53 huacas que pertenecieron a la cultura Maranga. Ellas fueron construidas en diferentes épocas aunque algunas tienen más de 2000 años de antigüedad. En octubre de 2003 fueron declaradas Patrimonio Cultural de la Nación por el INC. Démosle especial atención en nuestros paseos.
A diferencia de lo que sucede con otros importantes restos arquitectónicos ubicados en la capital que han sido rodeados y en ocasiones opacados por modernas e imponentes construcciones, el Complejo Arqueológico Maranga ha aprendido a convivir con animales, tiernos o salvajes, grandes o pequeños, que provienen de diferentes lugares y concitan la atención de los visitantes.
Concebido para cumplir funciones administrativas, este importante vestigio de nuestro pasado -construido hace más de 2,000 años forma parte de lo que hoy son las instalaciones del Parque de Las Leyendas, de ahí que su impresionante y misteriosa belleza arquitectónica que debería concitar la atención de niños y adultos, se vea opacada ante la sorpresa que causan hipopótamos, leones, avestruces, loros, monos y hasta ‘Manchitas’, la única jirafa del lugar.
Ávidos por saber el significado de aquellos ‘impresionantes montículos de tierra’ o esas ‘viejas construcciones’, como escuchamos decir a nuestro paso por el lugar, confirmamos que las 52 huacas del Parque de Las Leyendas, ubicado en el distrito de San Miguel, son un testimonio vivo de las culturas que poblaron la Lima prehispánica, nuestra Lima de antaño.